Un gusano está provocando el arranque de almendros

En la provincia de Córdoba, denuncia Asaja

almendro

Córdoba (EFEAGRO). La organización agraria Asaja Córdoba ha solicitado a la Junta de Andalucía que autorice el uso de materias activas, como el Imidaclorprid y el Clorpirifos, para el tratamiento del gusano cabezudo en el almendro, ya que produce «graves e irreversibles daños en un gran número de parcelas».

Necesidad de arrancar almendros

La patronal agraria ha asegurado este jueves en un comunicado que la presencia de este coleóptero, que ataca a los frutales de hueso, está provocando la necesidad de «arrancar almendros en numerosas explotaciones con las graves pérdidas económicas que ello supone para los agricultores».

Las materias activas autorizadas para el almendro, ha asegurado, no da buen resultado, ya que «carecen de capacidad para desplazarse dentro de la planta y el número de tratamientos es insuficiente para una plaga que está prácticamente todo el año en el árbol».

Clorpirifos

Así, Asaja Córdoba ha puesto de manifiesto que el uso del Clorpirifos, un insecticida organofosforado, está autorizado excepcionalmente en la Comunidad Valenciana para naranjos, pero que en el caso de Andalucía la Administración ha denegado la posibilidad de su aplicación.

En esta línea, ha reclamado también a la Junta que, «en este momento de desesperación y ante la situación insostenible por la cantidad de vuelo (de gusanos) que hay en el campo» dé el visto bueno a repetir más de dos aplicaciones en almendro de forma excepcionales de una materia activa denominada Acetamiprid.

«Está demostrado que no es efectiva debido a que tenemos muchas más épocas de vuelo que veces autorizadas», ha añadido.

Ha lamentado que «la falta de materias activas autorizadas en Europa hace que esté en desventaja con otros países».

Ha pedido a la Junta que realice visitas de control a las zonas afectadas y sus limítrofes con el fin de localizar posibles focos y determine la rápida adopción de medidas tanto de control, prevención e información, como de asistencia técnica.

Provincia de Córdoba

La provincia de Córdoba cuenta con aproximadamente 15.000 hectáreas de almendros, según Asaja, por lo que el gusano cabezudo puede acarrear «graves daños y perjuicios económicos para los agricultores y la economía de la provincia, ya que, «por lo que está en riesgo todo el sistema económico que genera este cultivo».

Los signos que se detectan son lesiones en los órganos vegetativos de los árboles, para posteriormente ocasionar daños en tronco y raíces, lo que da lugar al debilitamiento general del cultivo o la muerte del árbol.

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