Los agricultores y ganaderos españoles llevan semanas movilizándose, organizando protestas y concentraciones que tienen como objetivo principal que las administraciones públicas pongan solución a problemas que sufre el sector desde hace décadas.
Los trabajadores del sector primario se iniciaron en el mes de enero en Extremadura, pero el éxito de las mismas consiguió que estas movilizaciones se expandieran por otras comunidades como Castilla y León, Andalucía, Castilla-La Mancha, Murcia y Madrid.
Las reivindicaciones de agricultores y ganaderos se centran en los bajos precios de origen, el aumento en los costes de producción, la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos a determinados productos agroalimentarios españoles y la negociación de la PAC, así como la competencia desleal procedente de otros países no comunitarios. Y es que estos no respetan los estándares de calidad y medioambientales que se imponen en la Unión Europea para productos como los cítricos o la miel.
El SMI no es el origen de las movilizaciones
El Salario Mínimo Interprofesional no es el origen del problema, pero sí ha terminado por colmar el vaso en un sector que arrastra problemas estructurales, según denuncia ASAJA (Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores).
El sector agrario sufre un importante déficit que se ve incrementado con la subida de impuestos al diésel, algo que se suma a la elevada fiscalidad de la electricidad, carburantes, lubricantes y maquinaria agrícola, del 21%.
El campo español necesita desarrollar un modelo competitivo y eficiente, integrado en toda la cadena y que atienda las necesidades de los clientes. Todos los agentes: proveedores de productos agrícolas como AgroSoluciones AB, productores (ganaderos y agricultores), cadenas de distribución, trabajadores, ingenieros agrónomos, consumidores finales y administraciones, deben participar en la cadena, sin dejar a nadie atrás.
La principal protesta de los agricultores, decíamos, está en el precio en origen. Los empresarios agrícolas y ganaderos no cobran un precio justo y, en algunos casos, no pueden ni cubrir los costes de producción. Cultivos como frutas, hortalizas, el aceite de oliva el cereal están en una crisis galopante de precios.
A esto se suman los aranceles impuestos en octubre de 2019 por la Administración Trump que recibieron el visto bueno de la Organización Mundial del Comercio. Productos españoles como el aceite, el vino y los quesos han sufrido en primer término esa medida restrictiva.
Esta lista de infortunios que hace reducir las ganancias se completa con el aumento del salario mínimo del 5,5% pactado entre el Gobierno y los sindicatos. En el campo español, con respecto a esta decisión gubernamental, existe cierto enfrentamiento entre agricultores y empresarios agrícolas. Mientras que los primeros apoyan en su mayoría la decisión del gobierno, los empresarios suman esta causa a la crisis que viven la agricultura y la ganadería.
El Brexit y las negociaciones de la PAC
Otro motivo que aviva las protestas masivas de agricultores y ganaderos es el Brexit y las negociaciones de la PAC. La Unión Europea, en su borrador de presupuestos para el periodo 2021 – 2027, prevé una caída del 14% de las ayudas, 925 millones menos de euros al año según la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG).
Con respecto a la salida del Reino Unido de la Unión Europea, muchas empresas agrícolas españolas ya se están preparando en caso de que ocurra un Brexit duro, sin acuerdo final. En ese caso, una opción pasaría porque los proveedores nacionales se establezcan en el Reino Unido con el fin de que las operaciones se consideren de tipo interno, y no exportaciones sujetas al pago de aranceles.
En el año 2018, Reino Unido representó el 8% del total de las exportaciones agroalimentarias españolas y las ventas totales sumaron 3.900 millones de euros, por solo 1.100 millones de importación, una balanza muy positiva para el mercado español.
España y otros países productores están presionando para que el presupuesto de la PAC en el próximo periodo 2021-2027 no disminuya y se mantenga en la línea del aprobado para 2014-2020, unos 400.000 millones de euros.
¿Cuál es el calendario de protestas de las próximas semanas?
Esta semana se han organizado protestas y movilizaciones en provincias como León, Ávila y Granada y en los próximos días acciones como tractoradas y cortes de autovías serán la tónica en Islas Baleares, Zaragoza, Cádiz y Albacete.
La crisis en el campo español se hace visible a todos los niveles y, por si fuera poco, el sector primario también recibe ataques constantes por parte de ecologistas y animalistas.
Desde el gobierno, el ministro de Agricultura, Luis Planas, ha priorizado recuperar la reputación de agricultores y ganaderos, y manifiesta la importancia del sector para fijar población en el medio rural y hacer frente a la España Vaciada.
