La Comunidad de Usuarios de Aguas Subterráneas (CUAS) de la Masa Mancha Occidental I ha advertido sobre «la mala práctica que algunos agricultores están llevando a cabo, regando las viñas después de la recogida del fruto, siendo un mal ejemplo para el resto de los regantes empeñados y comprometidos en mantener un equilibrio en el nivel freático».
«Si esta práctica se generalizase estaríamos malgastando unos recursos que nos serán necesarios en el futuro, cuando el cultivo realmente lo necesite», indican desde Mancha Occidental I.
Estas viñas, a las que se les ha estado aportando humedad poco antes de la vendimia, cuando se les retira el fruto tienden a recuperarse de forma natural, «por lo que está totalmente injustificada esta práctica», añaden.
Explican que “tenemos por delante un otoño, un invierno y una primavera que pueden presentarse lluviosos, pero si desgraciadamente esto no ocurriera, será más provechosa este agua cuando vayan a brotar las viñas que no desperdiciarla ahora, sin olvidar que el exceso de agua arrastra los nutrientes que aplicamos a una profundidad a donde la planta no los aprovecha, provocando en muchos casos que aparezca clorosis férrica, que después supone un gasto el corregirla”.
Por último, señalan que “acciones como la que aquí exponemos nos dejan sin argumentos para defender ante la Administración una dotación digna para los cultivos de cara a la próxima campaña de riego, sin olvidar los controles que puedan llevarse a cabo por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadiana”.
